y el cielo no bastaba para todas."
Las abejas son un fiel testimonio de que para ser aterrador no es necesario ser gigante, tener una dentadura afilada ni rugir como una fiera. Estos insectos tienen otras características que los hacen especiales: su zumbido, sus picaduras, su mente colmena (de hecho, el que dicho término surja de aquí lo hace evidente), su velocidad y la dificultad de esconderse o huir de ellas. Lo bueno es que la mayoría son seres pacíficos que no te harían daño si no tuvieran razón para ello. Lo malo es que si la tienen...
—Este tropo, a pesar de su nombre, también aplica a seres vivos similares, como los abejorros, las avispas, etc.
Si un enemigo es un árbol viviente, entonces uno de sus ataques, casi seguro, será el de sacar abejas sacudiendo el panal que lleva colgando. También puede ser que algún personaje use como arma un panal de abejas que es arrojado al área enemiga; estas abejas no suelen picar al lanzador.
En un entorno más fantástico, un enjambre de abejas puede tomar la forma de un monstruo gigante. Si está más enfocado a la Comedia Física, probablemente las abejas se junten para formar un objeto como un puño, un martillo o una lanza y "golpeen" a un personaje, dejándolo hinchado por las picaduras. Si la víctima en cuestión queda atrapada, el enjambre cubrirá todo su cuerpo menos los ojos.
Una temática común que involucra este tropo es la de huir de un enjambre de abejas furiosas. Esto sería muy difícil de hacer en la Vida Real o, al menos, un humano la tendría muy difícil. Si se da este caso, la persecución terminaría en el momento en el que el fugitivo encontrase un lago, un río o un cuerpo de agua y se sumerja adentro a salvo de las abejas. Esto no sería recomendable, ya que en la Vida Real las abejas pueden esperar a que su presa salga. Lo mejor es cubrirse con barro o alguna protección cualquier piel que pueda estar expuesta.
Si un juego tiene un nivel dentro de un Camino Colmena, lo lógico es que esté repleto de enemigos que invoquen este tropo, aunque también puede verse en otros paisajes como jardines, cavernas o junglas.
Si un juego tiene como enemigo una abeja y esta al picar envenena al jugador, es casi seguro que el veneno tendrá el mismo efecto que el de una serpiente, un sapo, una araña o el de cualquier otro bicho que esté por ahí.
Compáralo con El Oso Peligroso, que también puede poner en aprietos a más de uno, aunque sus fuertes son otros.
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Ejemplos:
Videojuegos- Es un enemigo recurrente a lo largo de los juegos de Donkey Kong Country. En el juego los llaman los Zinger.
- En The Legend Of Zelda: A Link to the Past, hay algunos árboles que sueltan un enjambre de abejas si uno los embiste. Por suerte, se pueden matar con una espada.
